Frank Quitely

Vincent Deighan, más conocido dentro de las fronteras del Noveno Arte como Frank Quitely (Glasgow, Escocia 1968) es al cómic mainstream lo que Jeff Tweedy (Wilco) al rock mainstream, desde el clasicismo, a veces juguetones, otras respetuosos, siempre se distinguen de la media por su indudable clase. Una viñeta de Quitely, como una estrofa de Tweedy, siempre guarda ese saber hacer y ese estilazo que la mayoría no puede ni soñar.

Quitely curiosamente ya estaba en aquellos Authority de Millar, suyos eran los lápices, una explosiva afluencia de estilos (Moebius, Herrimann, Neal Adams, Otomo…) en un dibujante superlativo que además, narra, diseña secuencias y planifica páginas con una maestría inigualable. Una bestia parda que ha dado algunos de los trabajos más bellos del cómic comercial del siglo: All Star Superman, sus New X-Men o el ilimitado alarde de talento que ha sido Pax Americana.

Comenzó a despuntar a finales de los ochenta con trabajos autoeditados y para pequeñas editoriales alternativas. Su estilo gráfico le irá abriendo puertas a partir de esos inicios, incluso en las editoriales y títulos más punteros. Por ejemplo en DC, para la que dibujaría en 1996 un alocado y denso “Flex Mentallo” salido de la imaginación de Grant Morrison (sin duda un escritor puntero en la industria de los superhéroes).